domingo, abril 23, 2006

Mucho que contar

Con más de casi 20 años a cargo de la Tropa San Jorge, tengo mucho que contar. Tanto como lo tengo para recordar cada vez que pienso en campamentos y actividades con un sinnúmero de muchachos que ya son hombres y tienen su vida hecha o rehecha. Tantas veces me río o emociono mirando las fotos de Chiloé, Pucón o Los Angeles, que ahora voy a compartir una de estas anécdotas.

Esto sucedió en el campamento de las Termas del Flaco, no recuerdo el año, pero quienes se recuerden del evento podrán confirmar que esto en realidad pasó. Partimos una tarde en un par de mini buses de turismo que nos fueron a buscar al colegio. En ese entonces, todavía las hermanas franciscanas formaban parte del grupo (la hermana Verónica era la JG) y el hermano Claudio Salgado (hoy dia sacerdote), eran fijos para estas actividades.

Bueno, como ya se supondrá, íbamos como sardinas en esos "panes de molde"; lo largo del viaje y lo zigzagueante del camino con sus subidas y bajadas hicieron que un gordito, que resulto ser una revelación en ese campamento, empezara a vomitar todo lo que tenia en el estómago... y lo que no tenia también.

Tantas fueron sus arcadas, las que finalmente eran sólo eso, porque ya no habia más que botar, que hicieron que el deseo de vomitar se hiciera colectivo. A lo menos 6 scouts y guias comenzaron a vomitar también, tanto que las bolsas plásticas se acabaron.

Cuando quedó sólo una, la única alternativa fue que todos vomitaran en una sola bolsa. "El scout comparte con todos..." se hizo efectivo ese día.

Pero faltaba lo peor: cuando aquella última bolsa ya no sostenía mas esa mezcla, fui el encargado de lanzarla por la ventana (que scouts ecológicos ni que nada).

La bolsa paso de mano en mano, hasta hacérmela llegar. Yo sin pensarlo dos veces, asqueado por la situación y siendo el más cercano a la ventana, la tiré como pude para afuera.

Pero de lo que pasó entonces, nadie ha sido capaz ni con los años de hacerse responsable. Alguien cerró la ventana, la bolsa rebotó, se abrió y manchó de arriba a abajo... escurriendo por la puerta.

Todo gracias a aquella persona que dijo: "seguramente el aire de afuera está haciendo a los niños ahogarse...cerremos esta ventana".

Juan Carlos Campos
Jefe de tropa de ese entonces

5 Comentarios:

A la/s 10:03 a. m., Blogger Gabriel E. dijo...

No recuerdo, o tal vez nunca supe, quién era el gordito aquel... aunque si yo fuera él preferiría que no se hiciera público, total. ¡han pasado tantos años!!

 
A la/s 1:59 a. m., Blogger Monseñor Berríos Histórico dijo...

...

 
A la/s 2:34 a. m., Blogger Monseñor Berríos Histórico dijo...

...

 
A la/s 12:47 a. m., Blogger Jorge dijo...

....publiquen el nombre del gordito....el público lo pide!!!!!!

 
A la/s 12:54 a. m., Blogger Jorge dijo...

.........Termas del Flaco,.,,,,,mi primer campamento...
...lo mejor....
el calor infernal del dia, las caminatas a la cueva, la suvida al cerro a ver las huellas de los dinosaurios, las pisinas de barro y agua caliente que venian de perilla en un lugar de 30 grados.....a pesar de que las yemas de los dedos quedaron quemadas, mi cutis quedo maravilloso con el barro!!!!!

Saludos a todos!!!

 

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